sábado, 25 de agosto de 2018

ANDROID ENVIA 10 VECES MAS DATOS A GOOGLE QUE iOS A APPLE


           Cada vez nos preocupamos más por nuestra privacidad cuando navegamos por Internet o utilizamos determinados servicios. A pesar de la GDPR, la nueva ley de protección de datos de la Unión Europea, nuestros datos personales siguen siendo recopilados y utilizados por las grandes empresas de Internet con distintos fines. Aunque prácticamente todas las empresas de Internet recopilan datos, algunas lo hacen más que otras, aunque quien seguramente más datos recopila de todas es, como ya nos imaginaremos, Google, tanto desde su navegador y buscador como desde Android.

   Últimamente Google está en el punto de mira los usuarios y las organizaciones más preocupadas por la privacidad, y es que recientemente se ha podido comprobar que los smartphones Android envían a Google nuestra ubicación exacta 340 veces al día, incluso aunque no queramos y desactivemos el historial de ubicaciones, algo que, además, ha sido admitido por Google y que, según parece, no tienen intenciones de cambiar. Ayer mismo, además, se daba a conocer que el modo incógnito de Google Chrome no protege nuestra privacidad realmente, sino que todo el tráfico va registrado con “identificadores”, anónimos, sí, pero identificados.

   Hoy, Google vuelve a ser noticia en cuanto a temas de privacidad, y es que un reciente estudio de 55 páginas acaba de demostrar cómo los smartphones  Android en reposo mandan a Google 10 veces más de datos de los usuarios que los que mandan los dispositivos iOS a Apple. En total, se calcula que los smartphones Android envían a Google un total de 11 MB de datos al día, unos 350 MB de datos al mes.

Casi la mitad de estas conexiones están relacionadas con la publicidad

   De todas las conexiones, el estudio ha demostrado que el 46% del total está relacionado con la publicidad, enviando datos a las principales plataformas de publicidad asociadas a la compañía, como, por ejemplo, Google Analytics, DoubleClick, AdWords y AdSense. Además, los propios investigadores aseguran que, dada la gran cantidad de datos que se recopilan, incluso si estos datos fueran anónimos (como los que se generan en el modo incógnito de Google Chrome), al estar asociados a un ID, se podría llegar a eliminar dicho anonimato, asociándolos todos ellos a sus correspondientes usuarios.

   Es más, aunque no utilizáramos servicios de Google (algo prácticamente imposible en un smartphone Android), el gigante de la tecnología seguiría recopilando información sobre nosotros en el momento que naveguemos por Internet y veamos un banner, o simplemente al ejecutar una app con publicidad.

iOS no es privado, simplemente lo es más que Android

   Esto no quiere decir que iOS y Apple sean compañías totalmente privadas, ni mucho menos. Tal como demuestra el informe, Apple también recopila datos de los usuarios de iOS, aunque lo hace con mucha menos frecuencia, concretamente 10 veces menos. Dado que Apple no tiene diferentes plataformas publicitarias como Google, esta compañía recopila datos analíticos de uso de sus dispositivos, útiles para seguir mejorando sus productos y poder detectar y corregir posibles fallos en los mismos.
  
Además, si usamos aplicaciones de Google, o apps con publicidad en las plataformas de Google, directamente estaremos enviando ya nuestros datos a esta compañía, además de a Apple.


Fuente: RedesZone


lunes, 13 de agosto de 2018

FACEBOOK SE ALIA CON LA BANCA PARA SABER CUANTO DINERO TIENES


       Piensa por un instante toda la información que Facebook ha obtenido sobre ti durante los años en que llevas usándolo. Sabe cuáles son tus intereses, cuánto has viajado, qué móviles y ordenadores has tenido, qué costumbres de ocio tienes, cual es tu perfil psicológico aproximado, qué tipo de amistades tienes, dónde viven esos amigos, si has visitado sus hogares en alguna ocasión... Sabe prácticamente todo sobre nosotros, pero le queda un último escollo: el dinero que tenemos.

   Ahora la empresa de Zuckerberg quiere cambiar eso y ha pedido a los grandes bancos estadounidenses que compartan con ellos la información de sus clientes, incluyendo las transacciones realizadas con sus tarjetas de crédito y los saldos de las cuentas corrientes.