Ser más feliz sin Facebook es definitivamente posible, según un nuevo estudio científico publicado por el “Instituto de la Felicidad” de Dinamarca (porque al parecer eso es algo que existe).
Facebook hace que tengamos una vida virtual que muchas personas en realidad no tienen, pasando cada vez más tiempo en la red social y menos tiempo en la realidad. Cuando deben enfrentarse a la realidad, anhelan ser esa persona ficticia que son en Facebook, lo que les provoca ansiedad, tristeza y en algunos casos, depresión.
El estudio comprobó el efecto que tenía una sola semana sin acceder a la red social.
Los voluntarios fueron divididos en dos grupos; uno de ellos siguió accediendo a Facebook normalmente, y el otro dejó de hacerlo y dedicó su vida a otras tareas o aficiones. Después de una semana, tuvieron que responder a una serie de preguntas sobre cómo se sentían. Los datos resultantes son interesantes:
- El 88% de los usuarios que había dejado de usar Facebook se consideraba “feliz”, por un 81% de los que seguía usando el servicio. El motivo, según los científicos, es que Facebook nos permite compararnos con nuestros amigos, familiares y conocidos; en vez de centrarnos en lo que necesitamos, la tendencia del ser humano es centrarse en lo que los demás tienen, y esta red social nos permite saberlo al momento.
- El 84% de los que habían abandonado Facebook declararon apreciar sus vidas, mientras que sólo el 75% del otro grupo dijo lo mismo.
- El 20% de los usuarios de Facebook se declararon insatisfechos con sus vidas, contra el 12% del grupo que dejó de usarlo.
- Así pues, los usuarios de Facebook tienen un 39% más posibilidades de ser infelices que los que no lo son.
Puede las comparativas con la vida de otras personas sean inevitables, aunque no es menos cierto que también nos permiten aprender de ello.
Fuente: http://www.omicrono.com